Tumor Cerebral Curado |

Tumor Cerebral Curado

W. C. – Nueva Jersey


Hace varios años mi hijo me llamó llorando. Su esposa fue trasladada de urgencia al hospital porque había caído inconsciente. Le dije que oraría y le pedí que me mantuviera informado de lo que estaba pasando.

Después de que los médicos le hicieron muchos exámenes y escaneos, dijeron que necesitaba una cirugía de emergencia. Tenia un tumor grande en el cerebro y los cirujanos dijeron que probablemente no sobreviviría la operación; y si lo hiciera, sería un vegetal.

Ellos procedieron con la operación tal y como mi hijo solicitó. Me llamó mientras la familia esperaban juntos en una sala de espera privada. Lo animé al decirle que Dios estaba allí con ella y guiando toda la operación.

Recordé que la Sra. Eddy dijo que la Oración del Señor, el Padre Nuestro, podía curar cualquier cosa, así que les pedí que oraran esa oración, lo cual ellos hicieron durante las siguientes cinco horas. Después de la operación, los doctores dijeron que no sabrán nada hasta que ella despierte. Al día siguiente, no solo se despertó, sino que tenía hambre. El segundo día, para sorpresa del doctor, quería caminar por el pasillo porque no podía soportar estar en la cama. Una semana después se fue a casa con su esposo y sus dos hijos. Agradecí a Dios desde el fondo de mi corazón, y también lo hizo mi familia, porque sabían que algo más grande que ellos o que los doctores estaba allí esa noche.